Un éxito sin precedentes. Sólo así se puede describir la ronda de Tucuvi, el primer proyecto seleccionado de la convocatoria «Inversión de impacto para hacer frente al coronavirus».
Por primera vez en la historia de la Bolsa Social, el proyecto alcanzó el objetivo máximo de 160.000 € en tan solo 36 horas. Un hito que evidencia una vez más el compromiso de los inversores de impacto a la hora de impulsar proyectos que no solo busquen la rentabilidad, sino que además se enfoquen en tratar de mejorar la sociedad en la que vivimos.
Un asistente virtual para atender a quien más lo necesita
Tucuvi es un asistente virtual basado en IA (inteligencia artificial) y tecnología de voz. A través de llamadas al teléfono fijo del domicilio o al móvil de los usuarios, acompaña y monitoriza a éstos (principalmente pacientes de la tercera edad), consiguiendo una atención continua en su hogar.
El objeto de las llamadas de este ‘cuidador/asistente virtual’ es el seguimiento de diferentes enfermedades y/o situaciones de sus usuarios.
Sus fundadores son María y Marcos, dos jóvenes ingenieros biomédicos con una gran inquietud social. María tuvo la idea para la startup cuando trabajaba en una multinacional de dispositivos médicos. En este entorno se percató de que gran parte de la innovación en monitorización continua se creaba para gente joven, y de que las soluciones orientadas a los mayores seguían siendo obsoletas. Por eso decidió crear una solución que garantizase que todos los mayores pudieran disfrutar también de “un seguimiento continuo de su salud desde su propio hogar, beneficiándose de la tecnología igual que el resto de nosotros”.
Las aplicaciones de Tucuvi frente al COVID-19
Hasta ahora, Tucuvi ha validado varios módulos para sus llamadas, llevando a cabo pilotos clínicos y asistenciales en hospitales como el Ramón y Cajal, entre otros. Llamadas sobre la adherencia a los tratamientos, de satisfacción, de insuficiencia cardíaca, o de buenos hábitos, son algunos de los módulos validados hasta ahora. Sin embargo, la situación actual les llevó a pensar en cómo su solución podía ayudar durante esta crisis sanitaria del COVID-19. Y se pusieron manos a la obra: ya han realizado un primer piloto en Castilla y León, atendiendo a más de 1.000 personas y detectando 70 situaciones de alerta.
Las aplicaciones de Tucuvi para ayudar durante esta crisis son muchas:
- Estimación del número de contagiados: Tucuvi podrá estimar el número de contagiados en el hogar. Con un único número de teléfono, se podrían realizar y analizar más de 100.000 llamadas al día.
- Seguimiento a los pacientes crónicos de otras patologías: De este modo, se evita que estos pacientes se desplacen a los hospitales, reduciendo el riesgo de contagio.
- Seguimiento a los enfermos confirmados en su hogar: A través de llamadas periódicas, Tucuvi podrá evaluar la evolución de los síntomas de las personas contagiadas.
- Identificación de necesidades de apoyo: Tucuvi puede realizar llamadas a las personas que viven solas y en aislamiento, e identificar qué necesidades de apoyo tienen. En España, la población estimada en esta situación es de 2 millones de personas.
- Alternativa a las aplicaciones de evaluación de las CCAA: Actuar como complemento a las aplicaciones de evaluación de síntomas que están publicándose por comunidades autónomas. Esto puede servir a la gente que no se pueda descargar o no sepa utilizar una app móvil.
- Información general: Del mismo modo, Tucuvi puede actuar como número de teléfono de resolución de dudas relacionadas con el virus.
El futuro de Tucuvi tras el éxito de la ronda
Ahora, tras el éxito de su primera ronda de inversión, Tucuvi quiere poder dar cobertura a cada vez más gente a nivel nacional. Para ello, sus objetivos ahora son dos:
- Fidelizar y captar clientes: Para poder dar seguimiento continuo a un mayor número de personas y desarrollar módulos y casos de uso más complejos que puedan ayudar a más gente, Tucuvi necesita ampliar el equipo técnico experto en procesamiento del lenguaje natural, así como reforzar la parte comercial.
- Mejorar la empatía e inteligencia emocional y conversacional del asistente: Los usuarios de Tucuvi se tienen que sentir acompañados y apoyados. Para conseguir esto, es necesario trabajar continuamente en la inteligencia del asistente. Debe hablar de forma diferente si el usuario está alegre, triste, o tiene miedo, como está ocurriendo en el caso del COVID-19. Para ello, su idea es incorporar al equipo una persona experta en experiencia de usuario en interfaces de voz conversacionales.
Gracias a toda la gente que lo habéis apoyado, ya sea invirtiendo o difundiéndolo entre vuestras redes. ¡Muy pronto presentaremos al segundo seleccionado de la convocatoria!